Cuando se adquiere una vivienda, lo primero que queremos es decorarla a nuestro gusto, para tener las comodidades que siempre anhelamos. Pero ¿cuántas veces al año decidimos darle mantenimiento a nuestra casa? A caso cuando recibimos nuestro sueldo ¿destinamos una parte para los cuidados del hogar?
El paso del tiempo provoca el deterioro del inmueble como en cualquier otra cosa. Está en nuestras manos prestar atención a las reparaciones necesarias para que todo se mantenga en buen estado.
Nuestro hogar no puede cuidarse por sí sólo. El sueldo mensual debe incluir dinero para el mantenimiento rutinario de la vivienda y del jardín, así como para las reparaciones. La recomendación de los expertos es reservar anualmente del 1 al 3% del valor actual de su vivienda para los costos de mantenimiento y reparación.
En cuanto al mantenimiento del interior:
Revisa los sistemas de calefacción, gas y aire. Para evitar alguna fuga.
Evalúa el funcionamiento de las tuberías y grifos. Asegúrate que no exista ninguna gotera, evitará la perdida de gran cantidad de agua.
Revisa el sistema eléctrico. Para prevenir algún corto circuito.
Sustituye interruptores defectuosos y reemplaza fusibles quemados.
Repara, limpia o pinta las paredes y el suelo.
En cuanto al mantenimiento del exterior:
Mantén limpia el área de tu hogar.
Repara o pinta las paredes.
Revisa el techo y la impermeabilización. Evitará goteras y humedad.
Evalúa la iluminación. Las casas oscuras no son agradables.
Revisa el estado y funcionamiento de las ventanas. Para protegerte de robos y en temporadas de lluvia no entre agua.
Revisa y haz el mantenimiento adecuado a tu jardín. Le da más vida y pureza a tu hogar.
Es importante que a cada falla o detalle lo reparemos al instante, esto evitará que el gasto sea muy elevado. Además un buen mantenimiento protege y aumenta el valor de tu casa.
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